Esta serie fotográfica es una narración visual de un día completo en la Sierra de Badiraguato, capturada desde el Mirador El Perico y sus alrededores. Es un testimonio de nuestra habilidad para documentar la esencia efímera del tiempo y el espacio en una danza constante de cambio que revela la belleza eterna de la naturaleza.

Una noche de contemplación

La serie abre con una imagen impactante del Mirador El Perico, una imponente formación rocosa que se alza bajo el cielo nocturno. La luz de la luna ilumina el escenario, bañando las rocas en un resplandor mientras nuestra silueta se delinea contra el horizonte. Es una escena de contemplación tranquila, un momento de profunda conexión con la sierra de Sinaloa.

La danza de la luz a lo largo del día

Cada fotografía lleva al espectador a través de los diferentes momentos del día: desde el crepúsculo que despierta la vida del bosque hasta el atardecer que pinta el cielo con una paleta multicolor. Las imágenes exploran distintos aspectos del lugar, desde la quietud de las montañas hasta las acogedoras cabañas del centro ecoturístico que ofrecen refugio y calidez.

La magia del cielo nocturno

Los momentos nocturnos son igualmente mágicos. Las estrellas y constelaciones parpadean sobre un manto de cielo oscuro, mientras la Vía Láctea se extiende como un velo sobre la bóveda celeste. En otras tomas, la luna se asoma y su luz transforma los árboles y las tiendas de campaña en escenas etéreas de una belleza serena.

El cierre de un ciclo

La serie culmina con una fotografía de nosotros descendiendo del Mirador El Perico al atardecer, cargando nuestro equipo. Este acto cierra el ciclo de la jornada, una imagen que habla de conclusión y partida, pero también de la promesa de regresar a un paisaje que siempre llama a ser explorado.